Joyas por encargo

¿Te has preguntado alguna vez por qué la gente se hace hacer joyas por encargo? ¿Qué sentido tienen? ¿Vale la pena encargar una joya en lugar de, simplemente, comprarla ya hecha en una joyería o por internet? En este artículo te damos respuesta a estas preguntas y te explicamos algunas de las razones por las cuales creemos que sí que vale la pena regalar (o regalarse) una joya por encargo.

¿Qué es una joya por encargo?

Una joya por encargo es la que los joyeros creamos especialmente para la persona que la encarga. Se trata de piezas únicas, con un valor sentimental añadido. A veces, el cliente ya viene al taller con una idea muy clara de lo que quiere; otras, sabe que quiere una joya especial y personalizada, pero nos pide consejo y ayuda a la hora de diseñarla y crearla. En cualquier caso, el joyero es el que acaba creando un diseño al gusto del cliente y que, además, pueda perdurar en el tiempo.

Hay dos razones principales para encargar una joya personalizada:

1. Celebrar ocasiones especiales

Muchas veces quieres encontrar una joya especial para una persona u ocasión especial. Tu hija cumple 25 años. Tu chico ha perdido el anillo de su abuelo que tanto le gustaba y que no se quitaba nunca. Se acerca la fecha en que hace 10 años de ese primer beso. Te han ascendido en el trabajo y te quieres dar el gustazo. Tu sobrina se casa. Quieres pedirle a la mujer de tu vida que se case contigo… ¡Hay mil motivos para regalar (o regalarse) joyas!

Empiezas a buscar ideas por internet, te empapas de joyas en Instagram o en Pinterest y te recorres todos los escaparates de las joyerías de tu barrio para encontrar la joya perfecta, pero no está. Sí, hay cosas que quizá se acercan a lo que buscabas, pero no acaban de ser exactamente eso. Si la gema de ese colgante fuera rosa en lugar de azul, sería del color favorito de mi hija y le encantaría. Quizá si ese anillo fuera un poco más ancho, se parecería más al anillo del abuelo que perdió mi chico. Si la cadena de ese colgante fuera más larga, sería la joya perfecta para celebrar nuestros 10 años juntos. Si esos pendientes fueran un poco más pequeños, me quedarían fantásticos. Si ese solitario tuviera otra forma, a mi futura mujer (¡Espero que diga: “Sí”!) le iría (nunca mejor dicho) como anillo al dedo… Pero no. No es lo que tú querías. Qué rabia, ¿verdad?

Es entonces cuando llega el momento de plantearte pedirle a un buen joyero que te haga una joya por encargo. Una joya que sea única. Una joya que sea al gusto exacto de la persona que la va a llevar. Una joya que diga: “Me importas y he encargado esta joya especialmente para ti”.

Además, aunque pudieras encontrar una joya en el escaparate de una joyería o (incluso) por internet, el hecho de poder encargarla y hacerla a medida y a tu gusto le da un valor añadido: la sensación de que está hecha especialmente para esa persona y ocasión.

2. Aprovechar joyas familiares

A veces, tienes joyas en casa que tienen valor sentimental, porque eran de tu tía, o de tu abuela, o de tu padre. Pero el diseño de la pieza no te gusta o es anticuado y sabes que no te la pondrás porque no es de tu estilo para nada. Aun así, esa joya es “buena” y lleva un diamante (o un zafiro, o un ópalo, etc.) precioso que te gustaría lucir en una joya más “moderna”, hecha a tu gusto.

Pues, ¿qué mejor que aprovechar esas joyas familiares para darles una nueva vida? ¿Qué mejor manera de conservar el recuerdo de la persona a quien pertenecieron que hacer con ellas una joya por encargo? Crear un anillo, un brazalete o unos pendientes nuevos a partir de esa joya que no te pones es una forma muy original de reciclar joyas antiguas que sabemos que no nos pondremos porque el estilo no nos encaja, pero que tienen una historia detrás que queremos conservar.

¿Cómo lo hacemos?

En Arnald Joies estamos muy a favor tanto de las joyas personalizadas como del reciclaje de materiales para crearlas. De hecho, muchas de nuestras alianzas por encargo están hechas con joyas antiguas de la familia de los novios, algo que nos parece muy simbólico, ya que mezclamos las joyas de ambas familias para formar una nueva.

Como ya hemos comentado, hay mil ocasiones para crear una joya personalizada por encargo: anillos, pulseras, colgantes, pendientes… Tú solo nos tienes que traer una idea; de lo demás, nos encargamos nosotros.

Aquí puedes ver algunas de las joyas que hemos hecho por encargo en el pasado. Nosotros las llamamos nuestras joyas con historia, porque todas tienen una historia detrás; algunas felices, algunas no tanto, pero todas simbolizan algo.

No dudes en ponerte en contacto con nosotros si quieres una joya personalizada para ti o para alguien especial. Estaremos encantados de hacer que tu idea sea una realidad.